Cuando vayas a alquilar una vivienda debes tener muy claro los gastos que deberás asumir de forma obligatoria, tanto si eres el inquilino como si eres el propietario.
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Los gastos de una vivienda
El contrato de arrendamiento es el que manda, así que todo debería quedar reflejado en él. Si hay algún aspecto que no se haya incluido en el contrato, la LAU (Ley de Arrendamiento Urbano), cubre ese vacío con una serie de normas. A continuación reflejamos algunos de los gastos de una vivienda que tendrás que asumir. Tantos si eres propietario como si arrendatario.
Si eres el arrendador
- Te corresponde el pago del IBI.
- Los gastos de comunidad, tanto cuotas mensuales como derramas.
- Alta de los suministros (luz, agua, gas). Si la vivienda no tenía alguno de estos suministros básicos dados de alta, deberás correr con ese gasto.
- Seguro de hogar, que no es obligatorio pero sí recomendable, sobre todo del continente.
- Averías y reparaciones. La vivienda debe estar siempre en condiciones de habitabilidad, por tanto cualquier reparación consistente en renovación o mantenimiento de tuberías, instalación eléctrica, desagües, calefacción, etc., conservación de techos, paredes y suelos, te corresponde llevarlas a cabo. Así mismo también deberás cubrir la reparación o sustitución de los electrodomésticos (salvo que sea una reparación menor o que el mal uso por parte del inquilino haya provocado la avería). Las plagas que puedan venir ocasionadas por problemas en las tuberías o desagües también son responsabilidad del casero.
- Deberás afrontar las reparaciones provocadas por el desgaste habitual o por el paso del tiempo que superen los 150€.
- Infórmate sobre el seguro de impago de alquiler.
Si eres el inquilino
- Obviamente tienes que afrontar el pago de la renta mensual.
- Los gastos de los suministros de agua, luz, gas, teléfono, internet…
- Las pequeñas reparaciones provocadas por el desgaste habitual y que no superen los 150€.
- Igual que en el caso del arrendador, el seguro del hogar no es obligatorio pero sí recomendable. En este caso lo que interesa es tener asegurado el contenido. En caso de que no se tenga contratado seguro, deberás correr con el gasto de roturas de cristal, por ejemplo, etc.
- Cualquier multa que venga provocada por una denuncia por ruidos o conductas inapropiadas.
- Te aconsejamos que le eches un vistazo a nuestro artículo sobre contratos y formas de alquilar una vivienda.
Estos son los gastos de una vivienda habituales a los que se tienen que enfrentar caseros e inquilinos, salvo que se exprese lo contrario en el contrato y ambas partes estén de acuerdo. Por tanto, es fundamental leer y entender cada apartado antes de firmar.
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